21 enero 2008

La Batalla de Yungay

He demorado mas de 10 días en terminar esta entrada pero al fin me animo a hacerlo. El día escogido era 20 de enero, fecha en la cual se cumplía un aniversario mas de la Batalla de Yungay, escenario donde se destruyó al ultimo proyecto de confederación de algunas de las antiguas colonias españolas en América del Sur: Perú y Bolivia.

 A continuación un pequeño resumen de un articulo que escribí bajo el nick de "Franz" para El Gran Capitan, un
portal de Historia Militar.



A raíz de las guerras intestinas provocadas por los caudillos militares tales como Agustín Gamarra, y por insinuación de éste, surgió la idea de una Confederación entre Bolivia y Perú, antaño parte fundamental del Imperio de los Incas, el Alto Perú y el Bajo Perú durante la dominación española, un solo pueblo, una sola cultura; que fue llevada a cabo más adelante por el mariscal don Andrés de Santa Cruz.

Todo hacía prever el brillante provenir de la Confederación, la Hacienda pública se incremento y fortaleció; se protegió la industria, el comercio y la instrucción pública. Los Estados Unidos y los países europeos, en particular Inglaterra, se apresuraron a establecer relaciones cordiales con el nuevo poderío creado en Sudamérica, y sólo Chile, que tenía un estadista de larga visión vio con inquietud para Chile la Confederación de los países del Norte.

Acogió Chile a Gamarra y a otros descontentos; se apoderó de la flota de la naciente Confederación, en agosto de 1836, anclada en Lima; provocó la guerra (debido a un inconveniente con Santa Cruz, el gobierno chileno solicitó a modo de desagravio, condiciones imposibles de cumplir para el Protector, entre las cuales se encontraba la disolución de la Confederación regida por él) y envió a las expediciones de Blanco y Bulnes, en la última de las cuales vino Gamarra, ex presidente peruano. Esta última precisamente se definiría tras la debacle confederada en Yungay. (...)

(...) Tras la carga final de la caballería restauradora en Yungay y la dispersión final de los remanentes, los confederados cuentan tres mil hombres como bajas, la mitad de ellos muertos en el campo de batalla y la otra mitad hechos prisioneros. Similar número de muertos cuentan los restauradores, pero su victoria ha sido total, se han apoderando de toda la artillería y el material de guerra de sus enemigos, el Estado Mayor Confederado yace en el campo de batalla junto al núcleo del poder de Santa Cruz. El mismísimo Protector ha huido.

Tras la caida de Santa Cruz en Yungay, en el Perú habiendo sido elegido Agustín Gamarra, Presidente de la República, declaró disuelta la Confederación, proclamando la reunificación del Estado Peruano y derogó, en pago del apoyo chileno a su causa, dos leyes que perjudicaban enormemente al comercio de ése país; una, que declaraba Arica puerto franco, y la otra, que imponía a los barcos mercantes de procedencia europea doble tarifa en caso de haber hecho escala previamente en Chile, era por el contrario muy módica en el caso que no hubieran hecho escala previa.

Posteriormente Gamarra trataría de hacer suya de nuevo la idea de la confederación aunque esta ves a su manera,

Como se vio en un principio Agustín Gamarra no fue ajeno a la idea de Santa Cruz de crear una gran nación andina, pero en su plan esta idea no se podía realizar mediante una Confederación en la que, según su idea, era Bolivia la que llevaba el papel predominante. Al contrario, Gamarra, cuzqueño de nacimiento, pensaba que el territorio boliviano pertenecía al Perú por historia y por derecho y debía volver a él mediante su recuperación. Trataria de hacer realidad su forma de ver la situación iniciando una invasión de una Bolivia, aún convulsa tras el derrocamiento de Santa Cruz, con el fin de preparar su anexión al Perú. Murió en la batalla de Ingavi, tras ser derrotado por las huestes bolivianas del general Ballivián.

La Confederación fracasó finalmente y tuvo tanta oposición tanto interior como exteriormente porque el proyecto de Santa Cruz implicaba enfrentar la anarquía reinante, la fuerte tendencia a la disgregación, las divisiones y las fragmentaciones políticas que caracterizaban al Perú, Bolivia y a toda América Latina durante esos años. Contra la Confederación estuvieron la clase alta peruana (especialmente la élite de la costa norte que no se identificaba con Bolivia ni con los intereses del Sur), los intereses regionales, los principales caudillos de la época y además por supuesto Chile y Argentina.

Así terminó aquella triste jornada para el Perú y Bolivia, en la cual peruanos lucharon contra peruanos por la causa de Chile. Cuarenta y cuatro años después, debían pasar por ese mismo campo de batalla de Yungay, camino a Huamachuco, los últimos batallones peruanos resistentes a la ocupación chilena en un supremo gesto para salvar a su patria.

Esos son solo fragmentos del articulo completo. Si desean pueden verlo aquí.

12 comentarios:

  1. Resulta gracioso como cambia la perspectiva de la historia con los años. En 1836 la derrota de Santa Cruz fue celebrada en casi todo el Perú... Después de la guerra del Pacífico, es cuando comienza a idealizarse el proyecto unipersonal del boliviano.

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  2. Eso es normal, proque el Peru de 1836 no consideraba a Chile un enemigo y creia aun en la reunificacion con el Alto Peru. La derrota de Santa Cruz fue celebrada en todo el norte y centro peruano, especialmente en Lima. En el sur por el contrario, mucho mas apegado a las tradiciones quechuas y aymaras que la unian con Bolivia, fue tomada con desazon. Y no era un proyecto unipersonal, era un proyecto soñado por politicos y militares de ambos pais, pero cada uno queria ser su protector.

    Por otro lado, en 1883, tras la derrota con Chile, se noto que la Confederacion y la union con Bolivia les hubiera dado una fortaleza demorgrafica, politica y ecnomica y los recursos suficientes para convertirse en un gran adversario al que Chile no hubiera podido derrotar asi que casi 50 años despues la opinion cmabio.

    Y no resulta gracioso porque asi avanza la humanidad, a quien le hubiera parecido gracioso que a los mismos franceses que en 1791 mataban al rey, 15 años depues entronizarian a Napoleon. O los mexicanos que en el sXIX recibian en su pais a gente de Estados Unidos en busca de un futuro mejor luego serian ellos quien entraran a ese mismo pais bajo el mismo pretexto.

    Es normal, nadie puede predecir el futuro, y si te parece gracioso, bueno... pero hay que informarse mas.

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  3. La tradición del caudillaje, conspiraciones, dobles traiciones, etc, habría hecho caer a la confederación por su propio peso. No habría durado... Portales fue impulsivo, imprudente e ingenúo al involucrar a Chile en esa Guerra.

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  4. Los perdedores ...perdedores son ... y pasando por Yungay ...para ser nuevamente perdedores.

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  5. me parece que los peruanos nunca aprenderan, muy bien dice una frase un peruano es enemigo de otro peruano, a mi parecer esta confederacion peru bolibiano hubiera resultado ser un proyecto fortalecedor para ambas naciones pero interese personales hicieron que no fuera asi...
    chilenos oportunistas algun dia les llegara el dia..

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  6. soy chileno y creo en la integracion latinoamericana, acaso no se dan cuenta que esa fue una guerra por interes economicos de las clases politicas en donde como siempre los mas perjudicados son los pueblos...

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  7. comosiempore los peruano son muy tontos.. jeje, Viva Chile !

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  8. El mundo da vueltas chilenito culo roto, ya os llegará el dia, si no soy yo quizas se ria mi hijo o mi nieto.

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  9. no era lo que estaa buscando :(

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